sábado, 25 de julio de 2015

Un Perro Inteligente Puede Mas

Un articulo encontré que demuestra que perros inteligentes pueden derrotar a perros con devastadora boca, nada de patrañas como dicen algunos, un ejemplo es, Pera s ch silver vs tose s ex gr ch black mup

Hay aficionados a los que les gustan perros “con suficiente game para ganar”. Estos perros “con suficiente game para ganar”, son “pit bulls” devastadores y que tienen el suficiente poder para ganarle a su rival antes de que ellos mismos se paren/rajen en un “match / combate”. Normalmente son individuos que no podrían recibir/aguantar el mismo tipo de daño o castigo que ellos dan. A estos individuos se les conoce bajo el nombre de “cobardes devastadores” o en inglés “very rough curs”. Son animales con excelente boca pero con un game mediocre.

Los individuos mencionados normalmente son espectaculares de ver, dan buen “show”, agradan al público, son el tipo de “pit bull” por el que hasta el más novato de los novatos juraría. Demuestran una fuerza que no necesita explicación, hasta que se enfrentan a una fuerza comparable, que seguirá peleándole y llegándole. Cuando aparentemente estas dos fuerzas se enfrentan, el individuo con más “game” normalmente se lleva la victoria. Y entonces todo tipo de pretextos y excusas vendrán de los que supuestamente tienen un individuo “suficiente game para ganar”, ya que se convirtieron en el partido de “no muy game”, y aparte el perro se paró.

He sido testigo de algunos magníficos individuos (cobardes devastadores) de alto calibre, con excelente aire que se clasificarían dentro de ésta categoría. Sus dueños inteligentemente evitaron encuentros con individuos que posiblemente les ganarían, ya que a los “evitados” les sobraba “game”, “calidad”, y un “estilo” que les daría ventaja. Lo mencionado se aplicaba en particular si sabían que los “evitados” traían un perro bueno y en un “cuido/keep” excepcional.

Las acciones que mencioné en el párrafo anterior no son nuevas. Aficionados del “pitbull” practicaban la observación de “estilos” en ciertos perros para tratar de encontrar el perfecto estilo de pelea frente a estos “pitbulls”, con los que luego se enfrentarían. Esto le dio origen al dicho: “un match/combate bien preparado es un “match” 50% ganado”.

Hay perros extremadamente poderosos y con un game impresionante. Lo han demostrado contra adversarios de excelente nivel, pero como se ha escrito en eventos históricos, hay algunos que pierden. Le pasó a “Bullyson” cuando se paró contra su hijo. Por lo menos “Bullyson” demostró que podía producir perros con mayor calidad que él mismo. Subsiguientemente “Little Boots” le ganó a “Benny Bob”, y “Tombstone” (padre de nuestro Ch “Crash”) derrotó al reconocido “Bullyson Jr.” quien fue un devastador ganador de dos. En tiempos un poco mas recientes Ch.”Sandman” fué derrotado por Gr.Ch.”Buck”, y el inteligente Ch”Boiler” se lució con sencillez. Estamos hablando de perros que están en una liga por si mismos. En la gran parte de éstos combates, parece que estilo, inteligencia, mordida, habilidad, aire etc… fueron la razón de tales triunfos. Esto ayudó a sacar la profundidad de gameness en cada uno de los perros mencionados.Un tema poco discutido y que sin embargo juega un papel importante, es el “estilo” del perro. Muchos perros devastadores, mordedores y poderosos, han sido derrotados por ese tipo de perros “bailarines”, que mantienen al clásico rival mordedor fuera de la pelea merced a su gran habilidad. Estos pit bull bailarines tienden a frustrar y a desanimar a su adversario, mientras al mismo tiempo descargan daño. Un “pit dog” que se caracterice por morder duro, tiene que tener ocasión de hacerlo para causar daño, de modo que si no lo dejan morder es difícil pueda ganar el combate.

Hay perros que, parafraseando al antiguo campeón de los pesos pesados Muhammad Ali, “flotan como mariposas y pican como abejas”. Cansarán al rival mas devastador, mientras lo “diluyen”. Normalmente éstos bailarines tienen muy buenos pulmones, y esperarán para descargar toda su furia sobre su rival en cuanto detecten la más mínima señal de debilidad.

Los ganadores mas consistentes, tienen otra cosa : “inteligencia”. Encuentran el “estilo” de pelea en su rival, contragolpeando y aprovechando la ventaja de su mayor equilibrio. También encuentran el momento preciso para aplicar daño o castigo. Es seguro que atropellaran a un “pitbull” inferior. Estos “pitbulls” inteligentes esconden partes vulnerables del cuerpo, manteniéndolas fuera del alcance de su antagonista en el ring . Cuando les dan un golpe (mordida) duro, no pierden la cabeza, se mantienen tranquilos en una mordida fija. Normalmente hacen que su rival (el perro que supuestamente debería de estar arriba, dominando la pelea) esté lo mas incomodo posible, haciéndole así pagar el precio y condenándole a sufrir más desgaste.

Un “pit dog” inteligente tratará de quitarle todo lo que pueda a su rival. Los dientes son parte de la cacería. La nariz y la mandíbula son partes vulnerables. Otros perros incluso emplean mordidas de “foul” (en los testículos) y en el estómago.

Perros con esta inteligencia tiene una variedad de mordidas defensivas, por si se equivocan durante el “match”. Algunos distraen al adversario con una mordida para provocar que el oponente se descuide, solo para luego llegarle con una mordida precisa.

Peleadores con inteligencia se quedan en ciertas mordidas fijas, sacudiendo y masticando. En el momento que se dan cuenta que están haciendo daño en un lugar en particular (aunque no sea su mordida preferida), detectan debilidad y empiezan a trabajar con esa mordida.

Perros con menor inteligencia en el ring, abandonan una mordida excelente por una mordida preferida, causando menor daño.

Es común que individuos vean a un “pit dog” que conocen usar constantemente un “estilo” con buenos resultados, sólo para luego verlo perder cuando abandona su estilo ganador. El perro va retrocediendo en el “match” en sus esfuerzos de contra-ataque, ya que está usando las mismas técnicas que su oponente le está aplicando. Es claro que el rival tiene la ventaja, ya que sobresale en su propio “estilo”. Esto pasa más de lo que uno cree.

El perro inteligente va desarrollando una variedad de maniobras y mordidas durante sus “escuelas/shoolings”, que le ayudaran en situaciones altamente estresantes. Es agradable saber tiene variedad de que escoger. Va a necesitar todos los recursos posibles cuando se enfrente con un individuo de alto calibre.

Es frecuente que gente vaya con confianza de más a un “match”, ya que su “pitbull” se ha visto de clase superior con respecto a los perros con los que se había enfrentado hasta el momento. Cada vez que salga a “combate/match”, un “pit dog” debe de trabajar de la mejor manera posible. Es probable que se enfrente con un perro muy fino, apoyado por gente que ha hecho las cosas bien.

En su camino hacia el reconocimiento, muchos perros que hubieran sido excelentes se han acabado enfrentado con pits de primera línea, y han aprendido de la forma más dura que su nivel estaba un poco por debajo de lo esperado. Puede que estos perros no llegaran a su propósito por falta de algo en particular, como por ejemplo que sus dueños no hayan hecho las cosas bien etc.. En éste deporte tan exigente no hay espacio para error. El margen de error es “cero”, ya que la vida del perro depende de ello.

El “pit dog” debe de aprender en cada “topa” (pelea de entrenamiento). En toda “topa” debe de haber un propósito, por eso se llaman “escuelas” o en ingles “schooling rolls”. Se trata de enseñarles trabajo de “gimnasio” y una variedad de “técnicas”. Estos recursos le ayudarán a futuro. Durante las “escuelas” el perro se enfrentará con algunos oponentes que no le causaran gran daño mientras que otros le ayudaran a descargar sus mordidas favoritas. Deben de aprender a recibir castigo, siempre supervisando la situación para que no reciba un castigo duro. Mientras se juega y se enseña al perro, se va formando una unión y cariño entre perro y dueño. Esta amistad ayudará a revelar el progreso que se está llevando acabo y permitirá alcanzar los límites que se tienen que conquistar.

Los criadores de hoy en día tienen que buscar el “pitbull” completo; los “pit dogs” actuales compiten con varias líneas sobresalientes (no se pueden concentrar solo en una). Los viejos perreros decían que el “gameness” era multigenético. El ganar es circunstancial, ya que muchos factores intervienen. Cuando críen “pitbulls” traten de alinear los excelentes genes que hacen al “pitbull” un verdadero ganador. Ayúdenle lo más que puedan. La “clave” es el equilibrio.

La cría en el “pitbull” y el cuidado apropiado asegura la “primera base”. Selección honesta y buena “escuela” les ayudará llegar a la “segunda base”. Un “keep/cuidado” adecuado y gran madurez, los llevará a “tercera”. Un apoyo cercano, buen manejo del perro y asistencia adecuada les dará un “cuadrangular”.

El “pitbull” tiene la obligación de ser “game”, ya que él y sus antepasados fueron criados para ejecutar la acción de “nunca darse por vencido”. No tiene que ser “Campeón del Mundo”, pero tenemos que tomar en cuenta que “no hay que estar satisfechos con lo mediocre si existe la excelencia”.

Críen perros comprobados y convenientemente “testados”, o adquieran uno que éste criado de ésta manera. Hoy en día criadores con éxito aparte de “gameness” también crían por “estilo”, “stamina” y buen aire natural. Ciertos rasgos han predominado sobre otros (peleando con un “estilo” peculiar). Cuando llegan éstos animalitos al punto débil de su oponente, harán daños serios, rompiendo sus defensas y ganando el “combate/match”.

Otros perros evitarán ser dañados con su habilidad. Tirarán a la basura a los supuestos “mordedores” manteniéndolos afuera y desgastándolos. Los perros que se encuentran en un nivel muy alto castigan partes sensibles y vulnerables, mientras se protegen excepcionalmente. Se quedan sujetados o colgados de la oreja, la frente o el hocico. Estos perros atacan las partes mencionadas con mordidas y sacudidas tormentosas, ganándoles la mordida y borrando los furiosos esfuerzos que intenta su rival. Perros maduros, inteligentes, bien nutridos y acondicionados no tienen que morir para ganar.

El “Pitbull” anda en necesidad de un dueño que tenga buena voluntad y buen sentido común. Un dueño que tenga todos los rasgos que se le busca al “pitbull”.

Un verdadero “perrero” tendrá que saber leer perros. Un ignorante no es consciente de que tiene un buen perro, o por otro lado, cree que tiene uno bueno cuando en realidad no lo es.

Buenos “acondicionadores” están de acuerdo que un trabajador que le echa ganas y un buen dueño, harán un buen equipo. Parece lógico, ya que es obvio que el perro vendrá al “encuentro” en buenas condiciones (tendrán buen aire y buena voluntad). Estos perros son difíciles de parar…

Muchos perros se paran por falta de aire más veces que por falta de deseo de continuar. Pelean bien por poco tiempo (mientras tengan aire y respiren adecuadamente). Una vez que se “calientan” se quedarán atrás, los lastimaran, y probablemente perderán el encuentro. Algunos, los “muy game”, superaran éste momento crítico y peligroso, comenzarán a marcar su paso y a tomar un “segundo aire”. Estarán peleando por puro “gameness”. Estos perros fueron acondicionados desdichadamente o peor, se lastimaron durante el “cuidado/keep”. Tienen un enemigo y un traidor en su esquina.

El “Pitbull” es un animal bastante especial. El público en general tiene un concepto falso de él, y sorprendentemente es mal entendido por la mayoría de sus aficionados. Protectoras de otras especies o de otras maneras de ver las cosas los quieren “muertos”. Protectoras de animales (probablemente piensan que los “pits”no son animales) también dedican toda sus vidas a borrarlos de la superficie de la tierra.

Los que en realidad hacen el trabajo sucio para éstas organizaciones, son los dueños ignorantes de éstos magníficos perros, abusando de ellos, maltratándolos, o simplemente no pueden entender el magnífico animal que tienen frente a ellos.

Pueda que mucha gente elija no pelear nunca a sus perros, pero recuerden, ustedes escogieron y se sienten de maravilla sabiendo que tienen un “pitbull” y mejor si lo cuidan responsablemente.
El “Pitbull” no es para todos. Sería interesante si éste perro eligiera a su dueño. Quizás esperarían de nosotros lo que nosotros demandamos de ellos. Esto cambia la perspectiva y fijaría de nuevo la “probada del gusto”

sábado, 4 de julio de 2015

HISTORIA Y ORIGENES DEL APBT

Aunque el origen exacto del APBT no se conoce, podemos situar con certeza sus raíces, por lo menos ciento cincuenta años atrás o más, en Inglaterra. Durante el siglo XVIII y XIX el deporte de "bull baiting" ó peleas contra toros, estaba en su máximo apogeo y los perros fueron criados para sobresalir en esta faena. El mismo tipo de perro también fue utilizado por los cazadores para capturar presas y por los carniceros y los granjeros para dominar y controlar ganados ingobernables. Estos perros fueron llamados los " bulldogs. " Históricamente, la palabra " Bulldog " no apuntaba a una raza de perros en específico, sino que fue aplicada a los descendientes de los perros más antiguos del tipo Mastiff que sobresalieron en la actividad del "bull baiting". Los " bulldogs" de yore eran muy diferentes, y no se deben confundir, con los graciosos perros de exhibición de hoy en día. El viejo Bulldog de trabajo, criado para la acción, estaba más cercano en fenotipo y espíritu al APBT y/o el American Bulldog moderno. El uso de la palabra "bulldog " aplicado a APBT's persiste incluso hoy entre los fan's de los APBT.
Cuando el "bull baiting" fue prohibido en Inglaterra en 1835 la actividad de poner en combate un perro contra otro empezó a tener auge y llenó el vacío que dejó esta abolición. Un punto en disputa, a cerca de la historia del APBT, radica en si ésta raza de perros de pelea era esencialmente una nueva raza creada especialmente para este pasatiempo popular. Algunos autores, notablemente Richard Stratton, han teorizado que el APBT es esencialmente la misma raza que los del perros de la epoca del renacimiento usados en "bull-baiting", en gran parte puro mezclado luego con cualquier otra clase de perro, específicamente terriers. Estos autores consideran el actual nombre, American Pit Bull Terrier, un doble error, puesto que, en su opinión, la raza no es de origen americano y no es un terrier. Explican la atribución popular del origen de la raza a una cruza entre el "bull baiting" y los terriers como confusión retrospectiva con la historia de crianza de la Bull Terrier Inglés, quien nunca fue un perro de peleas y que además tiene su origen bien documentado. Otros autores que han investigado el tema, como el Dr. Carl Semencic, defienden que el APBT es de hecho el producto de una cruza entre el perro "bull baiting" y terriers, y que la raza simplemente no existió en su forma actual durante el Renacimiento. Ellos argumentan que al pensar en el linaje de APBT, no deberíamos fijarnos en los perros de show de hoy en día como Yorkshire Terriers, sino que por el contrario de en los animales de trabajo (probablemente ahora extintos) que fueron criados para mostrar gran tenacidad en el deporte de la caza. El problema de probarlo, que se presenta en discusiones sobre los orígenes de cualquier raza, es acrecentado en este caso por el secreto extremo de los criadores de los Pit Bull. Los pedigríes del siglo XIX, si se documentaron, no fueron divulgados, puesto que ningun criador iba a revelar a sus rivales los secretos de su éxito para que estos los imitaran. En cualquier caso, o más allá del mediados del siglo de XIX, la raza había adquirido todas las características esenciales por las cuales sigue siendo estimada hoy en día: sus capacidades atléticas impresionantes, su gameness sin igual, y su temperamento tolerante. Los antepasados inmediatos del APBT eran perros de peleas Irlandeses e Ingleses llevados a los Estados Unidos a mitad del siglo XIX. Una vez en los Estados Unidos, la raza divergió levemente de la qué fue producida en Inglaterra e Irlanda. En América, en donde estos perros fueron utilizados no solamente como perros de pelea, también lo fueron como "catch dogs" (es decir, para recuperar los cerdos y ganados perdidos) y como guardas de casa, los criadores comenzaron a producir un perro levemente más grande, con patas más largas. Sin embargo, este aumento de tamaño y peso era pequeño hasta muy recientemente. Los antiguos animales Irlandeses del siglo XIX raramente sobrepasaban las 25 libras ó 12Kilos, y no era infrecuente encontrarse con perros de 15-lb. En libros Americanos de principios del siglo IXI sobre la raza, es raro encontrar un espécimen con peso superior a las 50 libras (20Kg aprox., con algunas notables excepciones). De 1900 a 1975, hubo probablemente un incremento muy pequeño y gradual en el peso medio de APBT's, sin ninguna pérdida notable en su desempeño. En adelante la gran mayoría de APBT's no son criados conforme al estándar tradicional, el axioma americano de "más grande es mejor " ha asumido el control en las prácticas de crianza de muchos criadores neófitos que se unieron a la ola de popularidad de los pitbull's en los años 80. Esto ha dado lugar a un aumento de la talla media de APBTs en los últimos 15 años, un fenómeno dañino para la raza en opinión de los expertos. Otra modificación menos visible de la raza desde el siglo XIX fue la fijación genética selectiva de los estilos de pelea (tales como especialistas frontales, especialistas en sofoque, etc.), pues la crianza de animales de competencia se sofisticó a medida que la competencia se hacía cada vez mas fuerte. A pesar de estos cambios, ha habido una continuidad notable en la raza por más de un siglo. Fotos de hace un siglo, muestran animales indistinguibles de los de hoy en día. Aunque, como en cualquier raza de estas características, usted encontrará cierta variabilidad lateral en el fenotipo a través de diversas líneas de sangre. Hay fotos de pit's de los 1860's que son fenotípicamente idénticos a los APBT's de hoy. A lo largo del siglo XIX, estos perros eran conocidos por una variedad de nombres "Pit Terriers", "Pit Bull Terriers", "Half and Half's", "Staffordshire Fighting Dogs", "Old Family Dogs", "Yankee Terriers", and "Rebel Terriers" por nombrar unos poos. En 1898, un hombre llamado Chauncy Bennet formó el "United Kennel Club" (UKC) con el único propósito de registrar "Pit Bull Terriers", pues el "American Kennel Club" no los reconocía. Originalmente, él agregó la palabra " American " al nombre y quitó la palabra "Pit". Esto no satisfizo a todo el mundo por lo que la palabra "Pit" fue añadida más adelante de nuevo al nombre entre paréntesis como un compromiso. Los paréntesis se removieron hace aproximadamente 15 años. El resto de las razas que reconoce actualmente la UKC fueron posteriores al APBT. Otro registro de APBT's lo lleva la asociación americana de criadores de perros (ADBA) inició actividades en septiembre de 1909 gracias a Guy McCord, amigo cercano de John P. Colby. Ahora bajo administración de la familia Greenwood, la ADBA únicamente se ocupa de los APBTs. El ADBA patrocina shows de conformación, pero principalmente, patrocina competencias de arrastre de peso las cuales prueban la fuerza, stamina y el corazón del perro. También publica trimestralmente una revista dedicada al APBT llamada "The American Pit Bull Terrier Gazette". Los entendidos manifiestan que el ADBA es el registro adecuado para APBT ya que ellos hacen esfuerzos para preservar las características originales de la raza. Desde 1936, debido a diversos objetivos para la cría, el American Staffordshire Terrier y el American Pit Bull Terrier han divergido en fenotipo y espíritu/temperamento, aunque ambos, continúan teniendo en común el buen carácter. Algunas personas que sintieron que después de 60 años de crianza para distintos objetivos, estas 2 líneas eran razas distintas. Otras personas prefieren verlos como dos líneas de la misma raza (de competencia y de show). De cualquier forma, la brecha continúa ensanchándose ya que los criadores de ambas razas dicen que es inadecuado mezclarlas. Al ojo inexperto, los AST's (American Staffordshire Terrier) pueden parecer más impresionantes y temibles, con una cabeza más grande y cuadrada, con los músculos de la quijada sobresalientes, un pecho más ancho y un cuello más grueso. En general, ni siquiera se aproximan en capacidad atlética para competencias a los APBT's de competencia. Debido a la estandarización de su conformación para propósitos de shows, los ASTs tienden a parecerse mucho entre si, mucho más que los APBT's entre ellos. Los APBTs tienen un rango de fenotipos mucho mayor, puesto que los objetivos de crianza fundamentales, hasta los últimos tiempos, no han sido producir un perro con determinada forma, color o pose sino producir uno capaz de ganar las competencias de Pit's, en las cuales las características estéticas no cuentan. Hay algunos APBT's de competencia que son prácticamente indistinguibles de un AST típico, pero en general son más inclinados, con patas más largas, y son más ligeros sus dedos, tienen además más stamina, agilidad, velocidad, y una potencia explosiva. Después de la segunda guerra mundial, hasta principios de los años 80, el APBT pasó algo desapercibido. Pero solo unos pocos devotos conocían la raza, la conocían en detalles. Estos devotos sabían típicamente mucho más sobre la ascendencia de sus perros que sobre el suyo, podían a menudo hablar de pedigrees de siete u ocho generaciones atrás. Cuando los APBTs se hicieron populares entre el público, alrededor del año 80, individuos infames con poco o ningún conocimiento de la raza comenzaron a tener y criar Pit's, los problemas comenzaron a surgir. Muchos de estos recién llegados no se adhirieron a las metas de crianza tradicionales de los antiguos criadores del APBT. Comenzaron entonces a realizar cruces aleatorios y engendrar cachorros persiguiendo solamente la ganancia monetaria. Peor, algunos neófitos sin escrúpulos comenzaron a seleccionar los perros para exactamente los criterios opuestos que habían prevalecido hasta entonces: Comenzaron selectivamente a criar los perros para mostrar agresividad al humano. Después de poco tiempo, estos individuos incrementaron la producción de Pit's agresivos hacia el humano llenando el "gran mercado". Esto, juntado con la propensión de los medios de comunicación a la simplificación y el sensacionalismo amarillista, dio lugar a la histeria anti-Pit Bull, la cual continúa a estos días. Debe ser evidente que, especialmente con esta raza, usted debe evitar este tipo de criadores. Encuentre un criador con una reputación nacional; investigue, por ejemplo, a los criadores que anuncian en reconocidas revistas. A pesar de la introducción de algunas malas prácticas de crianza en los últimos 15 años , la mayoría extensa de los APBT's siguen siendo muy amigables al humano. La Asociación Americana de Pruebas Caninas de Temperamento, que otorga títulos del temperamento para perros, señaló que el 95% de todos los APBTs que hacen la prueba la aprueban, comparado con un 77% para todas las razas en promedio. El APBT's es la cuarta raza con mayor porcentaje de aprobación.Hoy, el APBT todavía se utiliza (ilegalmente en los bajos fondos) como perro de peleas en los Estados Unidos; las peleas entre Pit Bull's también ocurren en otros países donde no hay leyes o donde los leyes existentes no se hacen cumplir. Sin embargo, la gran mayoría de los APBT's, aunque se crían persiguiendo ese fenotipo y genotipo del antiguo animal de peleas, rara vez se utilizan para este fin, mas bien, son leales y cariñosos perros de compañía que conviven plenamente con la familia. Una actividad que ha tenido mucho auge entre lo entusiastas del APBT es la competencia de halar pesos, estas competencias mantienen vivo el espíritu de competencia del APBT, pero sin sangre o dolor. El APBT está idealmente preparado para estas competencias, en las cuales sus cualidades de nunca abandonar la competencia así como su fuerza bruta cuentan. Actualmente, los APBTs tienen varios record's mundiales en varias categorías de peso. Se ha visto a un APBT de 70-lb. halar una mini-furgoneta!. Algunos APBTs se han entrenado logrando buenos resultados en el deporte de Schutzhund; estos perros, sin embargo, son más la excepción que la regla. Aunque el origen exacto del APBT no se conoce, podemos situar con certeza sus raíces, por lo menos ciento cincuenta años atrás o más, en Inglaterra. Durante el siglo XVIII y XIX el deporte de "bull baiting" ó peleas contra toros, estaba en su máximo apogeo y los perros fueron criados para sobresalir en esta faena. El mismo tipo de perro también fue utilizado por los cazadores para capturar presas y por los carniceros y los granjeros para dominar y controlar ganados ingobernables. Estos perros fueron llamados los " bulldogs. " Históricamente, la palabra " Bulldog " no apuntaba a una raza de perros en específico, sino que fue aplicada a los descendientes de los perros más antiguos del tipo Mastiff que sobresalieron en la actividad del "bull baiting". Los " bulldogs" de york eran muy diferentes, y no se deben confundir, con los graciosos perros de exhibición de hoy en día. El viejo Bulldog de trabajo, criado para la acción, estaba más cercano en fenotipo y espíritu al APBT y/o el American Bulldog moderno. El uso de la palabra "bulldog " aplicado a APBT's persiste incluso hoy entre los fan's de los APBT.
Aunque el origen exacto del APBT no se conoce, podemos situar con certeza sus raíces, por lo menos ciento cincuenta años atrás o más, en Inglaterra. Durante el siglo XVIII y XIX el deporte de "bull baiting" ó peleas contra toros, estaba en su máximo apogeo y los perros fueron criados para sobresalir en esta faena. El mismo tipo de perro también fue utilizado por los cazadores para capturar presas y por los carniceros y los granjeros para dominar y controlar ganados ingobernables. Estos perros fueron llamados los " bulldogs. " Históricamente, la palabra " Bulldog " no apuntaba a una raza de perros en específico, sino que fue aplicada a los descendientes de los perros más antiguos del tipo Mastiff que sobresalieron en la actividad del "bull baiting". Los " bulldogs" de yore eran muy diferentes, y no se deben confundir, con los graciosos perros de exhibición de hoy en día. El viejo Bulldog de trabajo, criado para la acción, estaba más cercano en fenotipo y espíritu al APBT y/o el American Bulldog moderno. El uso de la palabra "bulldog " aplicado a APBT's persiste incluso hoy entre los fan's de los APBT.
Cuando el "bull baiting" fue prohibido en Inglaterra en 1835 la actividad de poner en combate un perro contra otro empezó a tener auge y llenó el vacío que dejó esta abolición. Un punto en disputa, a cerca de la historia del APBT, radica en si ésta raza de perros de pelea era esencialmente una nueva raza creada especialmente para este pasatiempo popular. Algunos autores, notablemente Richard Stratton, han teorizado que el APBT es esencialmente la misma raza que los del perros de la epoca del renacimiento usados en "bull-baiting", en gran parte puro mezclado luego con cualquier otra clase de perro, específicamente terriers. Estos autores consideran el actual nombre, American Pit Bull Terrier, un doble error, puesto que, en su opinión, la raza no es de origen americano y no es un terrier. Explican la atribución popular del origen de la raza a una cruza entre el "bull baiting" y los terriers como confusión retrospectiva con la historia de crianza de la Bull Terrier Inglés, quien nunca fue un perro de peleas y que además tiene su origen bien documentado. Otros autores que han investigado el tema, como el Dr. Carl Semencic, defienden que el APBT es de hecho el producto de una cruza entre el perro "bull baiting" y terriers, y que la raza simplemente no existió en su forma actual durante el Renacimiento. Ellos argumentan que al pensar en el linaje de APBT, no deberíamos fijarnos en los perros de show de hoy en día como Yorkshire Terriers, sino que por el contrario de en los animales de trabajo (probablemente ahora extintos) que fueron criados para mostrar gran tenacidad en el deporte de la caza. El problema de probarlo, que se presenta en discusiones sobre los orígenes de cualquier raza, es acrecentado en este caso por el secreto extremo de los criadores de los Pit Bull. Los pedigríes del siglo XIX, si se documentaron, no fueron divulgados, puesto que ningun criador iba a revelar a sus rivales los secretos de su éxito para que estos los imitaran. En cualquier caso, o más allá del mediados del siglo de XIX, la raza había adquirido todas las características esenciales por las cuales sigue siendo estimada hoy en día: sus capacidades atléticas impresionantes, su gameness sin igual, y su temperamento tolerante. Los antepasados inmediatos del APBT eran perros de peleas Irlandeses e Ingleses llevados a los Estados Unidos a mitad del siglo XIX. Una vez en los Estados Unidos, la raza divergió levemente de la qué fue producida en Inglaterra e Irlanda. En América, en donde estos perros fueron utilizados no solamente como perros de pelea, también lo fueron como "catch dogs" (es decir, para recuperar los cerdos y ganados perdidos) y como guardas de casa, los criadores comenzaron a producir un perro levemente más grande, con patas más largas. Sin embargo, este aumento de tamaño y peso era pequeño hasta muy recientemente. Los antiguos animales Irlandeses del siglo XIX raramente sobrepasaban las 25 libras ó 12Kilos, y no era infrecuente encontrarse con perros de 15-lb. En libros Americanos de principios del siglo IXI sobre la raza, es raro encontrar un espécimen con peso superior a las 50 libras (20Kg aprox., con algunas notables excepciones). De 1900 a 1975, hubo probablemente un incremento muy pequeño y gradual en el peso medio de APBT's, sin ninguna pérdida notable en su desempeño. En adelante la gran mayoría de APBT's no son criados conforme al estándar tradicional, el axioma americano de "más grande es mejor " ha asumido el control en las prácticas de crianza de muchos criadores neófitos que se unieron a la ola de popularidad de los pitbull's en los años 80. Esto ha dado lugar a un aumento de la talla media de APBTs en los últimos 15 años, un fenómeno dañino para la raza en opinión de los expertos. Otra modificación menos visible de la raza desde el siglo XIX fue la fijación genética selectiva de los estilos de pelea (tales como especialistas frontales, especialistas en sofoque, etc.), pues la crianza de animales de competencia se sofisticó a medida que la competencia se hacía cada vez mas fuerte. A pesar de estos cambios, ha habido una continuidad notable en la raza por más de un siglo. Fotos de hace un siglo, muestran animales indistinguibles de los de hoy en día. Aunque, como en cualquier raza de estas características, usted encontrará cierta variabilidad lateral en el fenotipo a través de diversas líneas de sangre. Hay fotos de pit's de los 1860's que son fenotípicamente idénticos a los APBT's de hoy. A lo largo del siglo XIX, estos perros eran conocidos por una variedad de nombres "Pit Terriers", "Pit Bull Terriers", "Half and Half's", "Staffordshire Fighting Dogs", "Old Family Dogs", "Yankee Terriers", and "Rebel Terriers" por nombrar unos poos. En 1898, un hombre llamado Chauncy Bennet formó el "United Kennel Club" (UKC) con el único propósito de registrar "Pit Bull Terriers", pues el "American Kennel Club" no los reconocía. Originalmente, él agregó la palabra " American " al nombre y quitó la palabra "Pit". Esto no satisfizo a todo el mundo por lo que la palabra "Pit" fue añadida más adelante de nuevo al nombre entre paréntesis como un compromiso. Los paréntesis se removieron hace aproximadamente 15 años. El resto de las razas que reconoce actualmente la UKC fueron posteriores al APBT. Otro registro de APBT's lo lleva la asociación americana de criadores de perros (ADBA) inició actividades en septiembre de 1909 gracias a Guy McCord, amigo cercano de John P. Colby. Ahora bajo administración de la familia Greenwood, la ADBA únicamente se ocupa de los APBTs. El ADBA patrocina shows de conformación, pero principalmente, patrocina competencias de arrastre de peso las cuales prueban la fuerza, stamina y el corazón del perro. También publica trimestralmente una revista dedicada al APBT llamada "The American Pit Bull Terrier Gazette". Los entendidos manifiestan que el ADBA es el registro adecuado para APBT ya que ellos hacen esfuerzos para preservar las características originales de la raza. Desde 1936, debido a diversos objetivos para la cría, el American Staffordshire Terrier y el American Pit Bull Terrier han divergido en fenotipo y espíritu/temperamento, aunque ambos, continúan teniendo en común el buen carácter. Algunas personas que sintieron que después de 60 años de crianza para distintos objetivos, estas 2 líneas eran razas distintas. Otras personas prefieren verlos como dos líneas de la misma raza (de competencia y de show). De cualquier forma, la brecha continúa ensanchándose ya que los criadores de ambas razas dicen que es inadecuado mezclarlas. Al ojo inexperto, los AST's (American Staffordshire Terrier) pueden parecer más impresionantes y temibles, con una cabeza más grande y cuadrada, con los músculos de la quijada sobresalientes, un pecho más ancho y un cuello más grueso. En general, ni siquiera se aproximan en capacidad atlética para competencias a los APBT's de competencia. Debido a la estandarización de su conformación para propósitos de shows, los ASTs tienden a parecerse mucho entre si, mucho más que los APBT's entre ellos. Los APBTs tienen un rango de fenotipos mucho mayor, puesto que los objetivos de crianza fundamentales, hasta los últimos tiempos, no han sido producir un perro con determinada forma, color o pose sino producir uno capaz de ganar las competencias de Pit's, en las cuales las características estéticas no cuentan. Hay algunos APBT's de competencia que son prácticamente indistinguibles de un AST típico, pero en general son más inclinados, con patas más largas, y son más ligeros sus dedos, tienen además más stamina, agilidad, velocidad, y una potencia explosiva. Después de la segunda guerra mundial, hasta principios de los años 80, el APBT pasó algo desapercibido. Pero solo unos pocos devotos conocían la raza, la conocían en detalles. Estos devotos sabían típicamente mucho más sobre la ascendencia de sus perros que sobre el suyo, podían a menudo hablar de pedigrees de siete u ocho generaciones atrás. Cuando los APBTs se hicieron populares entre el público, alrededor del año 80, individuos infames con poco o ningún conocimiento de la raza comenzaron a tener y criar Pit's, los problemas comenzaron a surgir. Muchos de estos recién llegados no se adhirieron a las metas de crianza tradicionales de los antiguos criadores del APBT. Comenzaron entonces a realizar cruces aleatorios y engendrar cachorros persiguiendo solamente la ganancia monetaria. Peor, algunos neófitos sin escrúpulos comenzaron a seleccionar los perros para exactamente los criterios opuestos que habían prevalecido hasta entonces: Comenzaron selectivamente a criar los perros para mostrar agresividad al humano. Después de poco tiempo, estos individuos incrementaron la producción de Pit's agresivos hacia el humano llenando el "gran mercado". Esto, juntado con la propensión de los medios de comunicación a la simplificación y el sensacionalismo amarillista, dio lugar a la histeria anti-Pit Bull, la cual continúa a estos días. Debe ser evidente que, especialmente con esta raza, usted debe evitar este tipo de criadores. Encuentre un criador con una reputación nacional; investigue, por ejemplo, a los criadores que anuncian en reconocidas revistas. A pesar de la introducción de algunas malas prácticas de crianza en los últimos 15 años , la mayoría extensa de los APBT's siguen siendo muy amigables al humano. La Asociación Americana de Pruebas Caninas de Temperamento, que otorga títulos del temperamento para perros, señaló que el 95% de todos los APBTs que hacen la prueba la aprueban, comparado con un 77% para todas las razas en promedio. El APBT's es la cuarta raza con mayor porcentaje de aprobación.Hoy, el APBT todavía se utiliza (ilegalmente en los bajos fondos) como perro de peleas en los Estados Unidos; las peleas entre Pit Bull's también ocurren en otros países donde no hay leyes o donde los leyes existentes no se hacen cumplir. Sin embargo, la gran mayoría de los APBT's, aunque se crían persiguiendo ese fenotipo y genotipo del antiguo animal de peleas, rara vez se utilizan para este fin, mas bien, son leales y cariñosos perros de compañía que conviven plenamente con la familia. Una actividad que ha tenido mucho auge entre lo entusiastas del APBT es la competencia de halar pesos, estas competencias mantienen vivo el espíritu de competencia del APBT, pero sin sangre o dolor. El APBT está idealmente preparado para estas competencias, en las cuales sus cualidades de nunca abandonar la competencia así como su fuerza bruta cuentan. Actualmente, los APBTs tienen varios record's mundiales en varias categorías de peso. Se ha visto a un APBT de 70-lb. halar una mini-furgoneta!. Algunos APBTs se han entrenado logrando buenos resultados en el deporte de Schutzhund; estos perros, sin embargo, son más la excepción que la regla. Aunque el origen exacto del APBT no se conoce, podemos situar con certeza sus raíces, por lo menos ciento cincuenta años atrás o más, en Inglaterra. Durante el siglo XVIII y XIX el deporte de "bull baiting" ó peleas contra toros, estaba en su máximo apogeo y los perros fueron criados para sobresalir en esta faena. El mismo tipo de perro también fue utilizado por los cazadores para capturar presas y por los carniceros y los granjeros para dominar y controlar ganados ingobernables. Estos perros fueron llamados los " bulldogs. " Históricamente, la palabra " Bulldog " no apuntaba a una raza de perros en específico, sino que fue aplicada a los descendientes de los perros más antiguos del tipo Mastiff que sobresalieron en la actividad del "bull baiting". Los " bulldogs" de york eran muy diferentes, y no se deben confundir, con los graciosos perros de exhibición de hoy en día. El viejo Bulldog de trabajo, criado para la acción, estaba más cercano en fenotipo y espíritu al APBT y/o el American Bulldog moderno. El uso de la palabra "bulldog " aplicado a APBT's persiste incluso hoy entre los fan's de los APBT.